Tratar una quemadura

Existen varios tipos de quemaduras y distintos grados, según cómo afecte a las capas de la piel. La mayoría de las quemaduras que se producen son de tipo doméstico y de tipo térmico,  ya sea por agua hirviendo o por aceite.

En este artículo se va a explicar cómo tratar las quemaduras más leves, ya que lesiones más graves deben ser tratadas urgentemente en un centro de salud.

Las quemaduras leves o de primer grado, son superficiales, que afectan únicamente a la epidermis, la capa más externa de la piel. Sus síntomas son el enrojecimiento, la sequedad, el dolor y el hinchazón de la piel, pero sin ampollas.

Las quemaduras de segundo grado afectan a la epidermis y parte de la dermis. Los síntomas son enrojecimiento, hinchazón de la piel, ampollas, dolor, supuración de líquido y sensibilidad al aire.

Cómo tratar una quemadura

Lo primero de todo, es tranquilizar a la persona que ha sufrido la quemadura y después valorar el tipo de lesión y gravedad. Una vez hecho esto, si vemos que es una quemadura leve, seguimos los siguientes pasos:

Correr y enfriar la zona con agua fría o con suero fisiológico durante unos 5 minutos, hasta que se deje de sentir dolor. Para quemaduras de segundo grado, lo dejaremos durante unos 15 minutos.

Es importante que nunca se debe aplicar hielo directamente en la lesión. Para zonas donde no se puede mojar directamente con agua, se puede aplicar un paño húmedo.

Se puede aplicar algún tipo de gel para quemaduras, para evitar la infección de la lesión y aliviar el dolor. Nunca se debe de aplicar ungüentos.

Tapar la quemadura con una gasa esteril.

En quemaduras de segundo grado, con ampollas, nunca se deben de romper o explotar, ya que estas protegen frente a infecciones.

Si la persona tiene mucho dolor, se puede administrar algún tipo de analgésico.

Después de todo esto, se debe hidratar a la persona por vía oral.

Una vez hecho todos los pasos te aconsejo que acudas a tú médico de cabecera para que valore bien la lesión.

IMPORTANTE: revisa tú botiquín para asegurarte de que tienes todo el material adecuado para curar este tipo de heridas.